El trastorno por déficit de atención con hiperactividad es una patología que
ha generado una gran preocupación y tensión en el núcleo familiar, con un
impacto social notable en la actualidad. Realmente es el trastorno
neurobiológico que se produce con más frecuencia en la infancia, pudiendo
afectar aproximadamente a un 5% de la población infantil. Es por ello
importante tener un conocimiento sobre el tema, ya que detectarlo y tratarlo a
tiempo es muy beneficioso para un niño con esta patología. Con el tiempo la
intensidad de los síntomas podrían ir aumentando y el deterioro que sufre a
nivel social, educativo y familiar va siendo cada vez más notorios, de ahí la
importancia de la pronta evaluación. A la hora de prevenir dicha condición, los
padres juegan un papel esencial, ya que representan la base emocional que les
proporciona seguridad, la fuente de autoestima, aceptación y la referencia de
los patrones a seguir.
Por lo mencionado anteriormente los padres deben estar totalmente
involucrados y activos en participar en el tratamiento indicado y recomendado
por los psicólogos. A continuación, se describirá la información más relevante
referente al trastorno para que sirva de guía a los padres o al lector
interesado, aportando un contenido que permita orientar y promover la evolución
positiva de los niños.
¿Qué es el trastorno por déficit de atención con
hiperactividad (TDAH)?
El TDAH es un
término especifico que se refiere a un grupo de trastornos que se manifiestan
en la infancia y que se ha descrito desde la antigüedad y ha quedado plasmado
en la sociedad por autores como: H. Hoffman donde describe un alumno(a) con
TDAH a mediados del siglo XIX. En 1987 Bourneville hace mención a
“niños inestables” caracterizados por una inquietud física y psíquica
exagerada, incluso una actitud destructiva, con un leve retraso mental. En 1901
J. Demour expresa la presencia de niños de poca estabilidad en su
comportamiento, en el cual observan movimientos constantes que interfieren en
la atención de una actividad. Al siguiente año, Still aglomera esta patología,
evidenciando niños violentos, inquietos, molestos, destructivos y dispersos. En
1931
Shilder refiere la presencia de hipercinesia en pacientes con sufrimiento
perinatal, reafirmando de nueva la base orgánica de esta patología. En 1934 Kahn
y Cohen proponen el término “Síndrome de Impulsividad Orgánica”, para explicar
el origen del TDAH, ambos proponen la disfunción tronco encefálica como origen
de la labilidad psíquica de los niños y otras patologías conductuales.
Para el año 1970, es cuando la Asociación Americana
de Psiquiatría (APA) en su Manual Diagnostico y Estadístico de los Trastornos
Mentales 4TA edición, en conjunto con la Organización Mundial de Salud
(OMS) en su 10MA revisión, sustituyen el termino de disfunción
cerebral mínima por el “Trastorno por déficit de atención con hiperactividad”.
Hoy por hoy el
trastorno puede definirse como un síndrome de conductas con base neurológica y
un fuerte componente genético, que pude presentarse a lo largo de toda la vida de
la persona. El TDAH repercute con gran particularidad desde el nacimiento hasta
la adolescencia aunque continua con menor intensidad en la adultez. Este
trastorno es intrínseco de la persona que lo padece, es decir, como
consecuencia de ser una alteración neuropsicológica puede provocar
complicaciones para controlar el comportamiento, además de afectar de un modo
directo los procesos psicológicos de atención sostenida, retención de memoria,
autorregulación de la motivación, afecto, internalización del lenguaje y
procesos de análisis y tareas de enseñanza-aprendizaje y adaptación.
Sea cual sea el lugar
donde se encuentre el niño o adolescentes con TDAH, es importante resaltar que
por ser intrínseco puede manifestarse con síntomas distintos en cada individuo
y por tal razón requiere de un análisis y tratamiento adecuado e
individualizado.
Causas o etiología del TDAH
En la actualidad hablar acerca de las causas de este
trastorno es algo complejo. A pesar de los avances tecnológicos, no se cuenta
con una evidencia definitiva que explique los orígenes del trastorno ya que es
un trastorno neurológico heterogéneo o de diversas variables que no puede ser
explicado por una sola causa, sino por una serie de condiciones genéticas y
factores ambientales que lo generan. Sin embargo, a mediados del siglo XIX y en
la actualidad se ha venido estudiando y analizando su etiología. A
continuación, se describen las posibles causas:
Daños cerebrales: debido al poco avance tecnológico en los
tiempos que se dio a conocer esta patología, fue considerada un daño cerebral
como la principal causa de la hiperactividad, pero en décadas posteriores se
logró evidenciar que el trastorno no podía identificarse por esta causa. En la
mayoría de los niños que presentaban TDAH, solo se llegó a detectar que existía
una mínima disfunción cerebral que en ocasiones era indetectable.
El embarazo y nacimiento: se han considerado las lesiones prenatales y perinatales
como posibles causas del TDAH, sin embargo esta hipótesis tampoco ha conseguido
gran validez. De igual manera se ha barajado como posible causa el consumo de
alcohol por parte de la madre durante el embarazo.
Antecedentes hereditarios: los niños con TDAH tiene un su árbol genealógico,
familiares en ocasiones con trastornos psicopatológicos, incluyendo el mismo
TDAH. Es muy probable que la trasmisión genética tenga un papel preponderante
como una de las posibles causas de que algunos niños puedan presentar este tipo
de trastorno. Sin embargo, aun hoy en día son necesarias muchas más
investigaciones para poder confirmarlo.
Alimentación: normalmente la sociedad afirmaba o afirma que
los alimentos generan la hiperactividad, sin embargo, según estudios realizados
no son la causa de la enfermedad. No obstante, se han podido conocer diferentes
estudios que manifiestan la relación entre la hiperactividad y una dieta a base
de alimentos artificiales, como refresco y sustancias con colorantes, por lo
que se debe de tener un cuidado superior con dichos alimentos.
El plomo como factor incidente: la exposición al plomo es absolutamente
dañina en las personas, afectando el sistema nervioso central y de manera
perjudicial el desarrollo mental de los niños. En este sentido, es necesario afirmar
que existe una asociación afirmativa en cuanto a la exposición de la persona a
este material y el inicio de trastornos del comportamiento como el TDAH.
Aspectos psicosociales: aunque las variables psicosociales no son
consideradas críticas en el estudio de las causas del TDAH, se han ganado un
papel preponderante, ya que sin duda alguna todo el entorno en donde se desenvuelve
el niño influye en todo lo relacionado con su comportamiento, familia,
hermanos, amigos, entorno escolar etc.
Síntomas del TDAH
El
TDAH es un trastorno de origen neurobiológico que reflejan tres síntomas
principales:
· - Déficit de
atención o inatención: ocurre cuando el
niño(a) presenta gran dificultad para prestar atención, es decir, aun cuando un
adulto haga todo su esfuerzo no logran hacer que se concentre. Por ende le cuesta
aprender hasta lo más fácil como números, colores o formas.
· -Hiperactividad: tienen un nivel de actividad superior en función a
su edad y en comparación con el resto de los niños.
· - Impulsividad: en ocasiones es violento, precipitado y con
dificultad en el control de sus conductas, emociones y pensamientos.
¿Cómo puede un
padre o una madre tener idea de que su hijo padece TDAH? Para responder a esta
pregunta haremos referencia a algunas conductas, donde los padres pueden
evaluar de acuerdo a la frecuencia e intensidad con que sucedan, si su hijo
padece TDAH. Sin embargo, y para su correcto diagnóstico es necesario acudir a
un psicólogo. Este es un niño que tiende a:
a.
Distraerse
fácilmente y olvidarse de las cosas con frecuencia.
b.
Cambiar
rápidamente de una actividad a otra.
c.
Soñar despierts,
imaginar muchas cosas.
d.
Tener problemas
para culminar las tareas escolares como copiar la tarea, captar el dictado,
problemas matemáticos inconclusos, o también actividades domésticas.
e.
Extraviar juguetes
y útiles escolares con frecuencia y sin recordar su paradero.
f.
Correr demasiado,
con desesperación.
g.
Tener poca
paciencia.
h.
Expresar comentarios
incoherentes.
i.
Tener dificultad
para controlar las emociones.
Es importante destacar
que durante años los criterios diagnósticos del TDAH manifestaban dicha
enfermedad solo se presentaba en niños. Hoy en día se sabe que también los
adolescentes y adultos pueden sufrir de TDAH.
Tipos de TDAH
-TDAH, con
predominio hiperactivo-impulsivo: la conducta que predomina es la de la hiperactividad
e impulsividad.
Frecuentemente es más
sencillo identificar señales de este tipo de TDAH. Los niños que lo tienen suelen
distinguirse ya que no existe ninguna forma en que pueda estar sentado en su
pupitre, por lo que suelen llamar la atención por esto. Es decir, su
comportamiento es distinto a los demás niños de su misma clase. Incluso puede
resultar ser un poco molesto, irritante para quienes lo rodean.
-TDAH, con predominio del déficit de atención: cuando el síntoma principal es la
inatención.
El niño con TDAH tiende a mostrar signos de
poca atención como si fueran sordos, y al hablarles no fueran capaces de
escuchar lo que se les dice. Suelen parecer muy distraídos, su capacidad de
concentración es casi nula, lográndose distraer ante cualquier ruido, sonido.
Se distraen incluso en actividades recreativas, incluso viendo un programa de
televisión para niños.
En algunas ocasiones suelen estar aislados y
es un signo de preocupación para todos aquellos que lo rodean, sobre todo sus
maestros y padres.
-TDAH, tipo combinado: se encuentran presentes los tres síntomas
principales (inatención, hiperactividad e impulsividad).
En el caso de los niños inatentos, el riesgo
de fracaso escolar es mayor que en los hiperactivos. A su vez, los niños
hiperactivos suelen presentar más problemas de conducta que los inatentos.
Curiosidades del TDAH
¿En qué genero se presenta mayor incidencia el TDAH?
Es
un trastorno que se presenta más en niños que en niñas. Se calcula que suelen
desarrollarla 4 niños por cada niña.
los
niños que tienen este tipo de trastorno suelen tener una conducta que pudiera
llegar a definirse como de inadaptación, molesta, muchas veces como niños desordenadas
y poco agradables. Aunado a esto se visualizan comportamientos agresivos, la
pulcritud es casi nula y por lo general los maestros pueden diagnosticarla con
facilidad y sugerir la visita con un psicólogo especialista.
En
el caso de las niñas suelen presentar problemas de rendimiento académico,
ansiedad o depresión, y no es tan común que muestran conductas molestas. Por
todo ello, suele ser más difícil diagnosticar la presencia del TDAH en niñas.
El TDAH en
función de la edad
· Niños en
preescolar: emergerá el niño
hiperactivo con impulsividad, muy movido e imprudente, escalador de muebles,
jugará con cualquier objeto, poco obediente, se ensuciará al jugar. En sí, un
niño agotador ya que requiere de mayor atención por parte de los padres.
·
Niños en edad
escolar / primaria: presentará dificultad
para adquirir buenos hábitos tanto de higiene como académicos. Las tareas
escolares las presentará sucias y descuidadas. Persisten algunos problemas como
desobediencia, mal comportamiento y resistencia a realizar sus deberes.
·
La adolescencia: es probable que en esta etapa no predomine la
hiperactividad motora, sin embargo, le será difícil entender las clases, organizar
y planificar trabajos. También presentará dificultad con el control del tiempo
para llevar a cabo las actividades asignadas. Se mantendrán los problemas de
atención, así como la impulsividad.
Tratamiento del TDAH
Las
intervenciones psicológicas suelen ser una buena alternativa para contrarrestar
los síntomas de este trastorno, así como el apoyo de la familia, y la
aplicación de terapias que logren modificar la conducta de los niños.
Terapia
conductual
Basado
en identificar los factores que mantienen la conducta inadecuada, se delimitan
las conductas que se desea cambiar. Se lleva a cabo la observación y registro
de éstas, por lo general el psicólogo podrá llevar a cabo actividades
contingentes que pueda hacer que se alcancen las metas que se han propuesto.
Aunado
a esto, se complementa con diversos refuerzos positivos antes un cambio de
comportamiento que pudiera considerarse aceptable, otorgarle al niño
recompensas y premios positivos por su esfuerzo.
Entrenamiento para padres
Los
padres cumplen un papel importante en el cambio de conducta del niño o niña
con este trastorno por lo que se estará
estableciendo una especie de programa cuya finalidad es la de entrenar al padre
y a la madre en el manejo de situaciones propias del déficit de atención. En
donde se debe de resaltar la importancia del desarrollo del niño y la niña.
Terapia cognitiva
La
terapia cognitiva tiene como objeto identificar y modificar las cogniciones
(pensamientos) irregulares, poniendo de relieve el impacto sobre la conducta y
las emociones para sustituirlas por otras cogniciones más adecuadas. Estos
objetivos se llevan a cabo mediante diversos procedimientos, entre los que
destacan el entrenamiento en técnicas de auto instrucciones, autocontrol y
resolución de problemas.
Entrenamiento en habilidades sociales
Consiste
en aplicar técnicas cognitivo-conductuales en niños y adolescentes con TDAH en
problemas de relación con la familia, colegio e iguales ya que es común que
presenten dificultades en habilidades sociales y problemas de relación con los iguales.