Sí, sabemos que tener hermanos es una
enorme bendición para cualquiera. La vida de un hijo único puede resultar muy
solitaria y carente de emoción, ya que los hermanos le aportan a la vida un
tipo de emoción tan particular que, en ocasiones, ni siquiera se consigue con
los mejores amigos.
Los hermanos son nuestros primeros
amigos, aquellos con los que compartimos los primeros secretos y, en la mayoría
de los casos también son nuestros compañeros de travesuras. Son quienes nos
conocen totalmente, e incluso muchas veces, saben identificar cómo nos sentimos
con tan sólo mirarnos.
Sin embargo, no todo es color de rosa al
tener un hermano, ya que con la diaria convivencia se pueden presentar
altercados. En algunas ocasiones esas situaciones problemáticas quedan
resueltas automáticamente, pero en otras es necesario que los padres recurran a
todas sus estrategias como mediadores para resolver el conflicto.
Si eres padre y tus hijos constantemente
se están enfrentando uno con el otro, presta atención a nuestro artículo, pues
aquí te vamos a dar los tips que necesitas conocer para resolver los conflictos
entre tus hijos.
Ahora bien, ¿por qué pelean los
hermanos? Existen muchas razones por las cuales dos hermanos pueden discutir.
En primer lugar te podemos mencionar la rivalidad. Es común que se genere
cierta rivalidad entre hermanos. Esto se debe a que cada cual quiere ser mejor
que el otro y busca la manera de demostrarlo. A su vez, esto genera conflicto
entre ellos porque ninguno desea perder.
Así mismo, la envidia es otra de las
causas que ocasionan con frecuencia problemas entre hermanos. Hasta cierto
punto puede considerarse normal que uno de los hermanos (generalmente el menor)
sienta cierta envidia o desee tener las cosas que tiene su hermano. No
solamente los objetos materiales (algún juego o muñeco) despiertan estos
sentimientos, sino también otras cosas intangibles como los permisos para
salir, la atención de alguno de los padres, entre otros.
Ahora bien, si tienes hijos, seguro que en
ocasiones no sabes cómo lidiar con estas situaciones de discusión, las cuales
pudieran llegar al ámbito físico.
En primer lugar, permite que cada niño
relate su propia versión acerca de lo que ha ocurrido, dándote los argumentos
que él considera válidos. De esta manera podrás fomentar en ellos la sensación
de valía e importancia, en tanto que te haces una idea del conflicto en
cuestión y de la perspectiva de cada uno.
Una vez hecho esto, pídeles que se
pongan en el lugar del otro. Hazles preguntas que propicien la empatía en
ellos. Enséñales a ver las situaciones a través de la visión de los demás.
Así mismo, exhórtalos a que cada uno
plantee las posibles soluciones al conflicto, siempre teniendo presente al
otro. Explícales que la solución debe ser justa para los dos. Que deben
encontrar un punto medio en el que ambos se sientan bien.
Cuando ya cada uno ha planteado sus
opciones para solucionar el conflicto, es hora de que tú, empleando tus
habilidades como mediador intervengas y les ayudes a elegir la alternativa más
adecuada para que ambos estén contentos.
Ahora bien, existen algunos consejos que
queremos darte para que incentives en tus hijos la comprensión, la confianza y
la unidad en ellos. En primer lugar, debes enseñarles a tus hijos las normas
básicas de cortesía, explícales la importancia de un “por favor” o un
“gracias”. De esta manera ellos lo pondrán en práctica entre ellos mismos.
Igualmente, propicia en ellos el hábito
de compartir. Explícales que, a pesar de que uno o el otro sean dueño de algún
juguete, no hay ningún problema con compartirlo en algún momento. Enséñales lo
satisfactorio que puede ser compartir lo que tenemos con los demás. Con esto
podrás estar evitando conflictos futuros, ya que muchos se originan cuando
pelean por algún juguete.
En última instancia, supervisa la
información que reciben tus hijos a través de los medios de comunicación
visual. Es obvio que si suelen ver programas de TV, películas o videojuegos en
los que lo común son las peleas, gritos, insultos y demás, ellos se comportarán
de la misma manera. Por esto, como padre, debes estar muy pendiente de lo que
ven tus hijos en TV o a través de la Web.
Los conflictos entre hermanos son lo más
común del mundo. Sin embargo, es importante saber manejarlos y resolverlos para
que la convivencia en casa sea armónica. Enséñales a tus hijos lo afortunados
que son al tenerse el uno al otro.