POR QUÉ SIENTES QUE TE LASTIMAS

Si has sentido que luchar por mantener la estabilidad en una relación, en donde el esfuerzo lo colocas tú y la otra persona ni te toma en cuenta, la vida te está diciendo que es momento de sentir compasión hacia ti mismo.

 

Si alguien te lastima, bien sea tu pareja, tu madre, algún compañero de estudio, del trabajo, o algún vecino, es porque hay algo que debes aprender y que inconscientemente repites en tu vida y esto se manifiesta a través de personas que no te valoran como esperas.


Existen demasiadas situaciones en la vida que marcan a las personas, desde el divorcio de los padres, hasta la muerte de un ser querido.



Un amigo que actualmente se encuentra casado y que es padre, experimentó el abandono de su madre cuando apenas tenía cinco años, sus miedos de niño fueron creciendo con él, y sus experiencias negativas se acumularon al punto de afectarlo en la actualidad.
Si estás cansado de ser la víctima de alguien que te perturba en la actualidad o que te marcó en el pasado, aquí te indicamos qué hacer para dejar de amar a alguien que te lastima.
1.- No dejes que te coman las hormigas
Has escuchado el refrán “el que es de azúcar se lo comen las hormigas”, es probable que sí, pero no te hayas detenido a analizarlo. Ser y sentirse amado, no debe convertirse en una tarea en la que acabes sintiéndote “devorado” por las circunstancias.
Para poder comprender y amar a los demás, empieza a amarte a ti mismo un poco cada día. No dejes que los demás se aprovechen de tu buena voluntad. A veces es mejor detenerse, observar el comportamiento de esas personas que dicen amarte pero que te han estado haciendo daño, y hacer un alto. No les des permiso a otros de hacerte daño, nadie tiene poder sobre ti más que tú mismo.



2.- Sálvate a ti mismo
Antes de pretender ayudar a alguien, comienza a ayudarte a ti mismo. Ya que cada cambio positivo proviene de tu interior, inicia por modificar viejos esquemas que provienen de tu mente y que te han mantenido sumido en errores de percepción respecto a quienes te rodean.
Si realmente deseas que otros te amen y te valoren, que te tomen en cuenta y que te respeten, debes estar listo para cambiar. No confundas cambiar, con endurecer tu corazón, si te encierras, te asustas o rechazas a los demás, solo empeorarás el problema.
Tampoco le des la espalda a las personas que sientes que te perjudican, aprende a cambiar la visión de ellas. Recuerda que esas personas también atraviesan sus propias tormentas interiores, así que perdónalos y avanza.
3.- Cierra ciclos
Cuando tomas la decisión de sanar y perdonar a quien te lastimó, debes asegurarte de cerrar el ciclo. No vuelvas a pensar en las múltiples acciones y situaciones en las que te sentiste agredido emocionalmente.
4.- Rodéate de personas que te amen
Siempre habrá personas dispuestas a demostrarte su amor incondicional, sin ninguna segunda intención. Quienes te aman tienen un impacto positivo en tu vida, y de alguna forma tú en ellos. Rodéate de personas que te inspiren, te motiven y te llenen de dicha. Así recuperarás el poder sobre ti mismo.