Esta técnica ha sido implementada por los
psicólogos desde hace más de 30 años. Desde entonces todas las investigaciones
que se han realizado entorno a la escritura terapéutica han dado por resultado
de que es una excelente forma con la cual podemos afrontar nuestros problemas.
Al principio, puede resultarnos un poco incómodo e
incluso triste, pero los pensamientos indeseados, repetitivos y la ansiedad se
desvanecerán rápidamente. Podremos experimentar muchas más emociones positivas,
mejorando a su vez nuestro desempeño académico, laboral y a su vez nuestras
relaciones interpersonales.
La integración del evento traumático en nuestra
experiencia de vida, es lo que permite que la escritura terapéutica sea
precisamente terapéutica, ya que le damos un sentido a lo que estamos viviendo.
Al escribir no solo podemos asimilar mejor el acontecimiento, a su vez logramos
adoptar una perspectiva más racional y objetiva ya que despojamos de toda
negatividad al mismo.
¿Cuáles son los
ejercicios de escritura terapéutica que podemos aplicar para afrontar nuestros
problemas emocionales?
Cuando un problema nos afecta negativamente en
nuestro estado emocional, ese es el momento más oportuno para colocar en
práctica la escritura emocional o terapéutica. Para ello, debemos realizar
ejercicios de escritura de 20 minutos al día durante un periodo de 5 días
continuos.
Antes de comenzar es importante que tengamos en
cuenta que se trata de ejercicio de liberación emocional, por ende, debemos
concentrarnos en la situación que nos está afectando y dar rienda suelta a
nuestra escritura.
Es en este momento, debemos olvidarnos de las
reglas gramaticales y ortográficas, solo así evitaremos realizar pausas
innecesarias que nos puedan distraer del objetivo de nuestros ejercicios. A
continuación, detallaré los pasos a seguir:
Ejercicio número 1
En nuestro primer día el objetivo es sencillo, solo
debemos explorar el hecho que nos afecta y escribir cómo nos hace sentir el
mismo. Para lograrlo, iremos hasta lo más profundo de nuestros pensamientos y
sentimientos más íntimos.
Debemos preguntarnos si este malestar se vincula
con nuestra vida actual y cuál sería el rol que podría desempeñar en el futuro.
A medida que avancemos nos percataremos de que la escritura será más fluida.
Ejercicio número 2
En el segundo día profundizaremos mucho más en los
pensamientos y sentimientos, con ello podremos ver el efecto que han tenido en
todas las áreas de nuestra vida. Valoraremos la reacción que tuvimos ante
este acontecimiento e intentaremos determinar el grado de responsabilidad que
tenemos ante lo sucedido.
Ejercicio número 3
Durante el tercer día la escritura estará enfocada
en la exploración del hecho desde un punto de vista externo. Para ello, debemos
colocarnos en la posición de un observador externo, así conseguiremos un punto
de vista más racional.
Ejercicio número 4
En el cuarto día revisaremos todo el material que
hemos escrito, verificamos si hemos pasado algo por alto y luego
reflexionaremos sobre todo ello. De esta manera veremos con mayor claridad todo
lo que hemos ganado y aprendido con esta experiencia.
Ejercicio número 5
En el quinto día escribiremos una historia corta
sobre la situación que vivimos. Con ello, nuestra dolorosa experiencia perderá
su impacto emocional ya que le estaremos dando sentido a todo lo acontecido.