¿QUÉ HAY DETRÁS DE LA MELANCOLÍA?

Comúnmente asociamos la tristeza con la melancolía. Es por ello que es posible aseverar que todos nos hemos sentido melancólicos en algún momento de nuestras vidas.

Podemos decir que es un sentimiento ambivalente, debido a que nos hace recordar algo que en algún momento de la vida existió. Esto quiere decir que por un lado recordar el pasado nos llena de placer, pero, por otro lado, sufrimos por lo que hemos perdido.




Las personas melancólicas tienen un sistema nervioso más sensible, debido a la base nerviosa y hereditaria del temperamento. Los individuos con melancolía suelen tener las siguientes características:


- Les gusta ser perfeccionistas.

- Demuestran un alto grado de sensibilidad emocional.

- Poseen una enorme capacidad para concentrarse.

- Son muy analíticos.

- No les agradan los cambios.

- Sus estados emocionales cambian bruscamente.

- Son introvertidos.


Debido a las características del temperamento melancólico, es probable que en algunos casos puedan llegar a sufrir de distimia, este es un trastorno que se identifica por la falta de energía, dificultad para concentrarse, así como para la toma de decisiones, baja autoestima y sentimientos de desesperanza.


Quienes padecen distimia experimentan un estado de ánimo melancólico, es decir, no pierde la capacidad de sentir placer y disfrutar su día a día.


¿Cómo saber si es melancolía?


Como seres humanos podemos llegar a sentirnos decepcionados, nostálgicos, desanimados y abatidos, pero ello no significa que estemos pasando por un estado patológico porque todas las citadas son experiencias afectivas normales. El inconveniente surge cuando aparecen otros síntomas y la duración de alguno de esos estados es demasiado prolongada.


Si nuestros pensamientos se mantienen en el pasado, es porque nuestra realidad no nos está satisfaciendo, por eso intentamos encontrar en nuestra mente viejos lugares felices y también recordamos viejas compañías con quienes disfrutamos muchos buenos momentos.


Detrás de la melancolía se esconde la creencia de que cualquiera de nuestros momentos pasados es mejor a nuestra vida actual. Por lo tanto, la capacidad de apreciar el ahora y de aceptar la continua evolución de todas las etapas de la vida se nos distorsiona totalmente.




Ventajas de la melancolía


- Mejora nuestra memoria.

- Estimula nuestra creatividad.

- Permite que seamos más creativos.


¿La melancolía puede llegar a ser peligrosa para nuestras vidas?


Puede llegar a serlo cuando le abrimos las puertas a la depresión y a la insatisfacción, como lo mencionamos anteriormente, ello sucede cuando le permitimos a la melancolía perdurar por demasiado tiempo en nuestro presente. No debemos vivir en el pasado, debemos aprender a dejar ir las cosas, momentos y personas para poder pensar en las maravillosas cosas que nos deparará nuestro futuro.


En resumen, el experimentar la melancolía nos permite luchar contra el tiempo por decirlo de alguna manera, al recordar lugares y personas significativas nuestro cerebro se encarga de activar recuerdos positivos que nos motivan a seguir adelante. Por todo ello, la melancolía no es un sentimiento negativo.