Todo ser vivo está biológicamente
codificado para reproducirse y preservar la especie. Esto no deja de lado a los
humanos. Quienes, además, han tipificado este acto como la realización
personal, felicidad total y el objetivo para trascender de una mujer.
Socialmente, la mujer es preparada desde
la infancia para este momento y el entorno se presta para sentir la presión de
tener un hijo. En vista de eso, se ha idealizado la maternidad con esos
momentos hermosos de esa vivencia como el amor incondicional, la felicidad de
verlos crecer y la esperanza de que lleguen a ser personas de bien.
Sin embargo, por lo general, se deja de
lado la parte caótica y difícil de la maternidad. Al verse frente a frente con
las dificultades económicas, las preocupaciones de distinta índole y el ser
criticadas constantemente por la forma de criar a los hijos, la mujer puede arrepentirse
de ser madre.
¿Qué puedo hacer si estoy Arrepentida?
No te Juzgues
Los humanos somos una especie que
depende de sus padres por un tiempo muy prolongado. Y se depende especialmente
de la madre para la alimentación, desarrollo personal y físico. Lo que lo
convierte en un trabajo a tiempo completo, estresante y con estándares sociales
que sienten que deben ser cumplidos y sin derecho a quejas.
Pero ante toda decisión que tomamos,
posteriormente hacemos una evaluación de qué hubiera pasado de no haberlo
hecho. Es totalmente normal reflexionar sobre lo realizado. Esto no significa
que no los ames, solo que es un trabajo agotador y muchas veces te sientes sola
en él.
Exprésate
La maternidad viene con cambios emocionales,
fisiológicos y en el estilo de vida. Ciertas personas renuncian a sus empleos y
libertades por el bienestar de sus hijos. Todo esto con la esperanza de alcanza
la felicidad prometida. Ya se mencionó que esto no es necesariamente así. Sin
embargo, el juicio propio junto al miedo a la crítica social, reprimen toda
emoción de angustia, miedo y renuncia. Es normal sentirse agobiado, desconfiar
de lo correcto de la decisión y hasta arrepentirse de ser madre. Puedes y debes
hablarlo y expresarlo, preferiblemente con alguien de confianza. También puedes
escribir un diario o cartas personales que te ayuden a liberar esa carga
emocional.
Tú También Cuentas
No hay manual, ni entrenamiento para
enfrentar esta situación. Sentirte mala madre, incapaz, decepcionada o
frustrada convierte el ser madre en un reto diario del que nadie comenta y
muchos critican.
Tenerse a uno mismo en cuenta, así como
a las necesidades de uno mismo, no le hace mala madre. Pero sí que hay que
replantearse la maternidad y sus expectativas, buscando satisfacer las de uno
como persona. No renuncies a quien eres por ellos. Vales tanto como tus hijos.
Si te sientes realizada como persona, la maternidad también será un poco más
sencilla.
Disfruta de los momentos
Estereotipar la maternidad como algo
únicamente positivo (y en caso de sentirte abrumada o con ganas de renunciar
como una conducta egoísta) es tan malo como decir que es netamente malo. Todo
tiene una parte buena y una parte no tan buena. Los buenos momentos, esos que
son realmente satisfactorios son los que deben impulsarte a seguir.
No será fácil y mucho menos corto el
camino. Pero, cada día podrás encontrar algo hermoso que haga o diga que hará
que tanto esfuerzo tenga significado.
Depresión Posparto
Posterior al nacimiento del bebe es de
esperar que las madres estén alegres y pletóricas. Sin embargo, existe un
trastorno muy frecuente que es la depresión posparto en las que las madres
sienten angustia y cansancio excesivo y muchas veces no se sienten capaces de
cubrir las necesidades del bebé ni de ellas mismas. Incluso puede interferir en
el vínculo afectivo con el recién nacido.
La tristeza es la emoción predominante. Puede
ser expresada en palabras o llanto habitual o inconsolable. En ocasiones se une
a la preocupación por cosas negativas que aún no han pasado y que son muy poco
probables que pasen
Por otra parte, el trastorno cambia el
patrón del sueño y el apetito (puede estar aumentado o disminuido). A su vez,
se entra en conflicto emocional, donde se tiene la idea de que antes se era más
feliz y se debe a la idealización del momento del nacimiento.
Ante esta eventualidad lo mejor es
buscar ayuda profesional, que guíe a la madre y resto de familiares en este
periodo de cambio al que la familia no logró adaptarse. En Mi Psicólogo
Barakaldo encontrarás profesionales que pueden ayudarte. ¡No lo dejes para
mañana y llámanos al 675 713 537!
Literatura Recomendada
A continuación, os presento la
literatura relacionada con el tema por si os interesa ampliar la información:
“Madre hay más que una”. Autora: Samanta
Villar.
“Madres arrepentidas: Una mirada radical a la
maternidad y sus falacias sociales”. Autora: Orna Donath.
“Nosotras que lo quisimos todo”. Autora:
Sonsoles Ónega.
“Cosas que nadie te contó antes de tener
hijos” Autora: Cecilia Jan.