Las conductas impulsivas se refieren a
toda aquella acción que se realiza ante una situación en la que nos invaden las
emociones y el juicio se nubla de tal manera que, se pierde el control de las
emociones y el comportamiento es poco racional y a veces se acompaña de agresividad
y violencia. Por ello, al cesar el estímulo que desencadenó dicha emoción, suele
ser habitual replantearse lo ocurrido y sentir culpa por dicho comportamiento. Indudablemente
todos caemos en esta forma de actuar alguna vez en la vida. Aunque no todo el mundo es igual de impulsivo,
ni expresa su impulsividad de la misma forma.
Las conductas más impulsivas aparecen en
la adolescencia. Posteriormente, uno va adquiriendo consciencia de los límites
sociales y va desarrollando inteligencia emocional, lo que le permite plantearse
otras formas de actuar.
Cómo Reconocer a una Persona Impulsiva
Impaciencia
Tienden a actuar “aquí y ahora”. Tienen
la necesidad de sentirse comprendidos, dejando de lado la importancia de
encontrar el momento oportuno, así como no dedicando tiempo a pensar en cómo y
qué decir.
Por otra parte, pequeñas actitudes como:
responder una pregunta antes de que sea completamente formulada, no poder
esperar su turno y sentir que otros “estorban” son características que no solo
lo afecta como individuo, sino también como ser social.
Actúa, luego Piensa
En repetidas ocasiones pierde la calma y
la razón, actuando sin pensar en lo que esto puede acarrear. No se tiene el
tiempo suficiente para plantearse de manera empática las diferentes opciones. A
medida que uno va adquiriendo esta actitud, el círculo social se alejará e
incluso lo rechazará.
Baja Tolerancia
Al tener una baja tolerancia a la
frustración, el sujeto, se altera con facilidad. Presentan cambios bruscos en
su humor, presentando cierta irascibilidad. Además, su baja tolerancia los hace
personas con pensamientos negativos y malos perdedores. Esto crea cierta
inestabilidad en sus actividades y es por ello por lo que cambian
constantemente.
Desorganización
Dan la apariencia de desorden y pobre
autocontrol ya que, son víctimas de sus emociones e impulsos.
¿Cómo Puedo Mejorarlo?
La impulsividad afecta la calidad de las
relaciones interpersonales y las intrapersonales, produce tensión y fatiga
innecesaria. Por ello, conseguir técnicas para ser menos impulsivo es un
beneficio para la salud mental.
Acepta y Busca el Cambio
Lo primero es asumir la responsabilidad
de tus acciones y decisiones sin justificar ninguna de ellas. Se consciente de
que hay alternativas a tu comportamiento, así podrás desarrollar tu
inteligencia emocional y ser más empático.
Mientras se siga actuando de la misma
forma, se repetirá y reforzará la conducta. Por ello, romper el patrón negativo
y comenzar la búsqueda de un cambio es lo mejor que se puede hacer.
Toma el Control
Cada vez que te enfades, respira un par
de veces profundamente antes de seguir la discusión. Esta técnica permite
reposar momentáneamente para retomar el control de las emociones y determinar
el motivo que desencadenó esta reacción. Al ser una actitud repetida en el
tiempo ha de ser practicado en cada ocasión hasta perfeccionarla,
contextualizando la información y trabajando a partir de ella.
Planificación
Para conseguir que te entiendan organiza
tus prioridades, así como tus ideas. También puedes iniciar un curso, gimnasio
u otra actividad. Al asumir un compromiso se cultiva la constancia y si existe
la compensación al culminar dicha actividad, se practica el autocontrol y
motivación personal por superarse.
Relájate
Repetir una frase o mantra que te tranquilice
y te reconecte con tus emociones y las consecuencias de tus actos de manera
rápida y efectiva, es muy útil para hacer frente a la impulsividad. También
puedes alejarte momentáneamente, dar un paseo, salir a dar un paseo o
simplemente abrir la ventana nos brinda un pequeño cambio de ambiente y libera
tensiones, dando paso a un mejor raciocinio.
Busca Ayuda
Si sientes que nada mejora o que
interrumpe tu cotidianidad, se puede solicitar ayuda de un profesional. Cada
persona es particular y si coexisten otras particularidades cabe la posibilidad
de que estas técnicas no sean suficientes. En Mi Psicólogo Barakaldo podemos
ayudarte. Ponte en contacto con nosotros en el 675 713 537.